lunes, 23 de mayo de 2011

IMPRESIONES Y REPERCUSIONES DE LOS CHIC@S DEL ENCUENTRO CON ADOLFO PÉREZ ESQUIVEL (29 DE ABRIL DE 2011)

«Cuando me enteré que iba a venir Adolfo Pérez Esquivel me sentí muy orgullosa por el colegio que nos dio la oportunidad de conocerlo. Yo mucho no sabía de su vida, así que me informé mejor, y cada vez estaba más emocionada y cuando llegó el momento de verlo fue muy lindo porque lo admiro como persona y todo lo que logró en su vida. Lo que más me gustó fue escuchar su experiencia de vida y lo que me transmitió como enseñanza. Siempre pienso que a veces es imposible que las cosas que nos pasaron no siempre se pueden modificar. Me sentí muy identificada con el tema que hay que ser “rebelde”, pero no esa rebeldía tonta y de nenes, sino la que provoca el cambio y defender tus principios y valores». Yasmín Lupone (3º B).

«Algo que dijo Pérez Esquivel me quedó muy grabado en mi memoria y en mi corazón: “A pesar de todo, sonríanle a la vida”. Fue algo que me impactó y me puse como objetivo en mi vida. Otra cosa que aprendí fue a defender lo que pienso y mi opinión con fuerza y sin miedo». Matías Schafrik (3º B).

«Me emocionó mucho ver a alguien tan grande como él que sigue trabajando en algo que se nota le gusta mucho. Por otro lado también me da ternura. Fue un momento único». Josefina Machado (3º B).

«Antes de la visita de Adolfo, tenía como trabajo buscar fotos de él y a su vez encontré mucha info de lo que él hacía por los DDHH. Escuchándolo, me saqué muchas dudas de lo que había leído. También me alegré de que tengamos gente que luche por sus ideales a pesar de todo. Me puse feliz de haberlo conocido». Guadalupe Boente (3º B).

«Fue un momento interesante porque conocimos a una personalidad que se opuso a la dictadura y encima a un premio nóbel!» Alejandro Walsh (3º B).

«Creo que fue una charla muy rica, ya que no es lo mismo una historia contada que un testimonio». Julián Nizzoli (3º B).

«La visita de Adolfo fue una gran experiencia de vida que arrancó una semana antes, investigando sobre la vida de él. Y después, cuando lo tuvimos en vivo, nos contó todas sus experiencias y anécdotas». Mariano Romero (3º B).

«Fue una experiencia inolvidable, emocionante. Un testimonio que me encantó haber estado presente. Conocí a una persona muy importante que ha hecho y sigue haciendo por nosotros, por nuestro país, cosas para que mejoremos, cosas que quedarán en la historia». Abril Fausto (3º B).

«Antes de la visita, yo estuve en los preparativos, buscando info y haciendo un texto de presentación y a medida que iba conociendo más su historia y todo lo que vivió y su lucha por los DDHH me iba emocionando más, esperaba curiosa el encuentro y me asombraba por la VIDA entera de este hombre.
Durante la visita se leyó mi texto, me gustó cómo quedó y que haya transmitido que todos tenemos que luchar por conseguir paz y justicia para todos y por igual. No pude distraerme ni un segundo. Fue conmovedor y emocionante tener esa vida, ese testimonio, ese militante entre nosotros.
Durante todo el proceso, la visita y después, aún hoy, me movilicé interiormente mucho. Creo que a pesar de ya ser conciente de una parte de la realidad, esto me abrió los ojos y la cabeza por completo y me produjo unas ganas inmensas de luchar por los DDHH, que tienen que estar en manos de todos. Creo que la responsabilidad de todos es unirnos y pelear `por obtener la paz, justicia, derechos para todos». Ivanna Pietrantuonno (3º B). Antes de despedirse Ivanna le regaló a Adolfo su texto…

«Sentí admiración y por momentos dolor porque hay cosas que hoy en día, de las que él contó, que en mayor o menor medida siguen pasando. Fue un lindo momento porque el mensaje que él transmitió es que a pesar de grandes obstáculos, se puede seguir adelante. Admiré mucho la fuerza de voluntad y la valentía de enfrentar las cosas». Anónimo

martes, 3 de mayo de 2011

Un nobel en el SanFra

El viernes 29 de abril recibimos la visita de Adolfo Pérez Esquivel, una persona largamente destacada en la lucha por los derechos humanos. Esta merecida reputación comenzó a forjarse en los años 60, cuando empezó a trabajar con grupos latinoamericanos cristianos pacifistas, y con la fundación del periódico "Paz y justicia", de gran aporte al ámbito de los derechos humanos en nuestra región.



Nacido en 1931 y formado académicamente como arquitecto y escultor, trabajó como docente durante 25 años hasta que comenzó a formar parte y coordinar organizaciones para la liberación de los pobres por la no-violencia.



Al iniciarse, en 1976, el golpe de estado militar y represión, comandados por Jorge Rafael Videla en la Argentina, Pérez Esquivel contribuye a la formación y financiación de los enlaces entre organizaciones populares para defender los Derechos Humanos y apoyar a los familiares de las víctimas de la Dictadura. El "Servicio de Paz y Justicia", que él fundó, evolucionó en este contexto y sirvió como instrumento para la defensa de los derechos humanos promocionando una campaña internacional para denunciar las atrocidades cometidas por el régimen militar.

En 1980 recibió el Premio Nobel de la Paz por sus esfuerzos en defensa de los Derechos Humanos y en particular por denunciar los crímenes del terrorismo de Estado.




Luego continuó su trabajo viajando por la mayor parte de países de Iberoamérica, por Estados Unidos y Europa, denunciando los graves crímenes contra los derechos humanos en el continente americano. Fue recibido por parlamentarios de diversas naciones europeas. Gracias a su iniciativa se iniciaron procesos penales contra la dictadura militar argentina en Italia, España y Alemania.

Actualmente participa y preside diferentes fundaciones y organizaciones dedicadas al trabajo en pos de los derechos humanos en todo el mundo. Entre estas se encuentra el SERPAJ. Esta fue creada a partir de la realidad latinoamericana caracterizada por una situación de injusticia y violencia institucionalizada expresada en la miseria y la opresión, y como confluencia de la lucha de diversos grupos, obispos, pastores, religiosos y laicos, comprometidos con los procesos de liberación latinoamericanos, desde la opción no violenta.



En su visita a nuestra institución Adolfo se mostró afable en todo momento.




Solícito a cada pregunta que se le planteó, pasó un gran rato compartiendo con los chicos y los docentes su experiencia y su forma de ver la lucha por los derechos humanos, la solidaridad, la religiosidad y otros tantos temas que salieron a luz en esta enriquecedora charla.


Su presencia se dio en el marco del trabajo que realizaron los alumnos del ciclo superior del nivel secundario; quiénes hicieron un trabajo de investigación biográfica y de reflexión para desarrollar un cuestionario que guiara la disertación de Pérez Esquivel.






Luego de este diálogo, compartió un momento con los docentes de la casa que estaban presentes y otros que, tentados por la presencia de tamaña personalidad, se acercaron desde otros colegios de Don Bosco Almagro para disfrutar de la oportunidad de compartir con todos los que somos parte del SanFra y Adolfo, este grato momento.








Como broche de oro Adolfo nos regaló un dibujo (aprovechando sus dotes y dedicación artística) junto con un mensaje para el sanFra.







La visita concluyó con unas palabras de P.Giachetti y la despedida de nuestro invitado frente a todo el secundario.






Fue una experiencia inolvidable para muchos, que nos aporta y enriquece en el desarrollo personal, y en el trabajo educativo con los pibes. Forjar el pensamiento crítico, activo y solidario; y el trabajo por la formación de buenos cristianos y honrados ciudadanos es parte de la tarea diaria de cada docente y animador de esta casa, pero en ocasiones como ésta se realza y potencia exponencialmente haciendo de estos momentos, ejemplos para replicar que nos dan conceptos y objetivos para no olvidar por qué y para qué educamos.



Proximamente publicaremos una pequeña edición en video de este encuentro, donde podremos mostrarles las palabras de Adolfo Pérez Esquivel en el SanFra.